

Sabemos lo emocionante que es comprar los primeros muebles para tu hogar o transformar un espacio después de mucho tiempo. Pero nada arruina más esa emoción que darte cuenta de que el mueble no cabe en el lugar que imaginaste.
Medir correctamente antes de hacer tu compra es clave para asegurarte de que cada pieza encaje perfectamente en el espacio donde debe estar, sin sorpresas ni contratiempos.
MEDIDAS A CONSIDERAR
Mide el alto, ancho y profundidad del espacio disponible. Asegúrate de identificar elementos como paredes inclinadas, columnas o enchufes que no quieras bloquear. Deja al menos 2 pies de espacio libre frente a cada mueble para garantizar una circulación cómoda y funcional en el ambiente.
NO SOLO MIDAS EL DESTINO FINAL
A veces, al comprar muebles, solo medimos el espacio donde los colocaremos y olvidamos considerar el recorrido que deberán hacer para llegar allí. Es fundamental asegurarte de que el mueble quepa por puertas, pasillos, escaleras o ascensores. Si no es así, evalúa si es posible transportarlo desmontado o si necesitarás ayuda profesional para ingresarlo al espacio.
TOMA EN CONSIDERACIÓN LOS OTROS ELEMENTOS DEL ESPACIO
Evita bloquear las ventanas para permitir la entrada de luz natural. Si tienes aire acondicionado, considera si deseas que el flujo de aire dé directamente al mueble o si sería mejor ubicarlo en otra posición para mayor confort.